Archidiamo lacedomonjano, leuando guerra contra los arcadios, puso armas en·las tiendas e | mando | que escondidamente la noche leuassen cauallos en·torno de su real, e la

menos ardidamente, por confiança de·las naues a·las quales podian hauer recurso, | mando | las todas cremar, antes que diesse la batalla.§ .xij. De quitar el miedo

campo, retuuo los suyos fasta a·la setena ora, a·los quales | hauia mandado | que se reposassen e que comiessen. E como los enemjgos de fambre e

Virginio consol en·los volscos, como viesse de lexos correr sus enemigos escampados, | mando | a·los suyos que se reposassen, e tuujessen las vanderas assentadas. E assi

en mar, e en tierra.§ Epamjnidas thebano, contra los lacedomonjanos, endreçando la batalla | mando | correr los hombres de cauallo ante la fruente de aquellos. E como huujesse

armadura leugera, e la fuerça de·la gente puso en·la reeguarda. E | mando | a·los soldaderos, que fechos sus golpes diessen logar a·los enemigos, e

que aquellos que eran a cauallo, andassen primeros por cobrir los peones, e | mando | les que luego como los enemigos los escometerian, tornassen atras, e quando serian

aquellos spacios vmplio de caualleros spachados, por razon que la batalla no clariasse, | mandando | a·estos que a·la ferida de·los elefantes se apartassen, o tornassen

la nuestra batalla. Despues d·esto echado vn grito muy grande por todos, | mando | a·los sirujentes e a aquellos de·la armadura leugera echar dardos e

sciencia hauia esculcados. E como las legiones hauiendo sospechosa lur maestria, seguissen ordenadas, | mando | correr los hombres a cauallo del sinistro cuerno, deuante la cara de·las