«por el temporal y mortal: y el fijo del pescador, por el fijo del creador: y el hombre puro, por el que era hombre y Dios? O que troque tan miserable. o que gozo tan trastrocado, y lleno de entrañable tristeza. Donde es ahora gloriosa virgen aquel tan esclarescido consuelo, de·la salutacion angelica que recebiste, donde estuuiste toda llena de gracia? Donde es aquel gozo complido que sentiste en·la»