«y en tiempo quasi de sincopizar: teniendo por antigo costumbre de con algun trago de vino esforçar el desmayo de·los condemnados para morir: por doblar en·lo interior de su delicada persona, la cruel amargura de·la passion: dieron·le a beuer el vinagre. y como a malaues lo tuuo en·la boca el glorioso Jhesu, no le quiso beuer. lo primero por demostrar y abominar la iniquidad de·los»