«sacerdotes y los ancianos del pueblo: por acompañar su damnado desseo con error y compañya de·la muchedumbre: persuadieron y concitaron toda la gente para que pidiessen a Barrabas, y perdiessen al glorioso Jesu. O necedad de doctores. O poco saber de sacerdotes. O peruersidad y malicia de letrados. O dolor inextimable, anteponer al soberano dios, vn hombre sin piadad y pestifero, y la creatura maliciosa y dampnada, al creador y»