«por la qual esperauas ser eternalmente penado: muy sano consejo te fuera, que firmaras tu innocencia, con palabra de confession de verdad. ca por aquella palabra por la qual fueron fechas todas las cosas: huuiera remediado complidamente el yerro de tus palabras. Viendo Pilato que ni manya ni dilacion alguna aprouechaua con gente tan inhumana y feroçe, conosciendo la importunidad y furia de·los principes y ancianos: trabajo de saluar si»