«reseruado, en señal de superioridad y dominio. O maliciosos despiadados, quan contrarias eran vuestras obras a vuestras palabras: pregonauades por illicito y no conueniente deuer matar a Jhesu: y ofreciades le con vuestras manos y determinado consejo, para que muriesse. O ypocrisia sanguinolenta, como si no matassen los que aconsejan y dan auctoridad a·la muerte: derramaron pues los malditos sacrilegos por inuidia la sangre del justo muy conoscidamente: pues la»