«me creeres. y aquesto porque nunca mis palabras, ni mis obras creystes. y si quiƧa vos interrogare: no me responderes: porque ya otras vezes no me respondistes, quando vos interrogue como cristo fuesse fijo y heredero del rey Dauid. y tan bien soy cierto que no me dexares quantoquier sea jnnocente, porque matando me seays penados como quebrantadores de aquella ley famosa del Exodo: que defiende de no matar al jnnocente»