«y virtud simulada. Mas deuemos en nuestras oraciones encomendar a·la bondad diuina nuestros desseos y peticiones, quantoquier que pidamos en·ellas ser librados de nuestras dolencias, tristezas, y tribulaciones: suplicando al piadoso Jesu las reponga en·el secreto de su coraçon: y juntamente con·los merescimientos de su sagrada passion: las ofrezca delante del padre a gloria y alabança de su muerte sanctissima. ca assi como su passion sacratissima en·»