«se puede perder.§ Preguntando pues los benditos sieruos de Dios al maestro de·los maestros, y al repartidor de todas las gracias. Donde mandas señor, que te aparejemos la pascua? Llamando el misericordioso señor a Pedro y a Johan, dixo·les: yd vosotros a·la ciudad y topares con vn hombre que trahe vna cantara de agua: seguid le: y dires al dueño de·la casa donde el entrara: el maestro»