«comiesse el pan de·los angeles: suplico te vnigenito señor: pues a ellos quedo poderio de consagrar tan alto misterio, nunca la memoria perpetua de aquel caya de mi pensamiento, para la salud de mi alma: pues con el padre etcetera.§ Llegando se ya el sanctissimo tiempo de·la diuina misericordia, en·el qual nuestro dios y señor hauia determinado de redemir todo el mundo, no por corruptibles thesoros de plata»