«assiento de entera humildad, enseñar nos de menospreciar lo terreno: porque quedasse en·el coraçon del christiano blasonado por tan sin cuento el precio del menosprecio y humildad: por la qual quedasse a nuestra señora bendita para siempre jamas esclarescido nombre de madre del hijo de Dios viuo y eterno. O cosa de gran marauilla: hauer hecho de·lo mas baxo del suelo: lo mas alto del cielo. O milagro que»