«toda la gente. Manifiestamente parece que la passion y el propio temor de perder su lugar y su gente: peruertio en·los maliciosos judios el juyzio recto de·la razon: demostrando deuer se escojer el menor de·los daños, y anteponer el bien comun a qualquier particular: ignorando que no es licito en caso ninguno, matar el innocente que es justo. ca por tal acto mas se destruye el bien publico,»