«del mal de tu proximo. Deuemos pues con diligentissimo estudio ser misericordiosos: porque en todas nuestras operaciones hauemos menester la misericordia: la qual es virtud propiamente de Dios: como la yglesia cada dia lo reza, orando y diziendo. Deus qui proprium est misereri semper et parcere. y aborresce mucho Dios al que no lo haze: como dize Santiago. juyzio sin misericordia sera hecho, al que no hiziere misericordia. Llaue es, o alma christiana la misericordia, con·la qual»