«toma las melezinas. O redemptor mio lleno de caridad paternal: por curar nuestras dolencias, te plugo en tu gloriosa persona recebir melezinas tan fastigosas y amargas. Curaste nos señor por dieta, quando ayunaste en·el desierto tan aspero. Curaste nos con letuario, quando tu cuerpo precioso y tu sangre comunicaste en·la cena a·los sanctos apostoles. Curaste nos por suor, quando en·el huerto por nosotros suaste gotas de sangre.»