«resurreccion. perdona me señor muy amoroso, por la humildad de tu gloriosa virgen y madre: pues en·ella, y d·ella, y dentro d·ella fueste incarnado, criado, y nascido. y si no recibes aquestas pregarias de pecador tan indigno: llegue en mi adjutorio juntamente toda la corte del cielo: para que inclines sobre mi tu piedad y misericordia. Assentar m·e pues como desmamparado a·la puerta del parayso: y»