«que nace se dissuelue. Mas la obligacion del tal injusto vsurpador nasce por sola su mala voluntad. conuiene saber robando, o apañando lo ajeno: sigue se pues que no se puede quitar sino con voluntad justificada en restituir lo furtado. E assi parece que no basta la voluntad de aquel a quien se deue fazer la restitucion para quitar la obligacion como no aya seydo causa d·ello. A lo qual»