«la prosperidad: tan flaco en la aduersidad: e tan muchas vezes deliberando fazer muchos bienes: trahendo los poco a execucion. Confessados estos e otros defectos tuyos con dolor: e gran desplazer: e enoios: e llorados: delibera firmemente de siempre emendar te: e de aprouechar en meior. despues con llena renunciacion: e entera volundad: offrece a ti mismo en el altar de tu coraçon como sacrificio perpetuo. conuiene saber encomendando fielmente tu»