«muerte. Defiende e consierua la alma de tu sieruo: entre tantos peligros de·la vida corruptible. e acompanyando la tu gracia endereça me por la carrera de·la paz: a la patria de·la perpetua claridad.§ Comiença el quarto libro. e pone ante de todas cosas vna exortacion para recebir el cuerpo de nuestro senyor Jesu Christo. e fabla en voz del mismo Christo.§ Uenid a mi todos los que trabaiays:»