«para siempre honrado: venida es la hora: que tu dende eterno sabias hauer de venir: por que tu sieruo v[n] poco tiempo ste defuera e debaxo. empero viua siempre dedentro en ti. sea vn poco auiltado e abaxado: e desfallezca delante de·los hombres: e sea de passiones e dolencias atormentado para que resuscite otra vez contigo en el alba de·la nueua luz: e sea esclarecido en los cielos. Padre»