«poder de querer: o no querer otra cosa alguna: saluo lo que tu quieres: e no quieres. Mortifica me señor quanto a·las cosas del mundo: e da me gracia que por tu amor sea despreciado: e ignorado en este mundo. Faz me gracia que sobre todas las cosas desseadas yo fuelgue en ti. e de apaziguar mi coraçon en ti. Tu eres la verdadera paz del coraçon: tu solo eres»