«hombre sobre la tiera. Por·ende cada·uno deue tener cuydado de sus tentaciones: e velar en oracion. por que el dyablo no falle lugar de le engañar: el qual nunqua duerme mas busca a quien trague. No hai hombre tan perfecto e sancto: que no haya tentaciones alguna vez. e no podemos del todo star sin ellas. Empero las tentaciones muchas vezes aprouechan al hombre. haun que sean enoiosas: e graues.»