«rresplandesçientes njn los altares njn piedras preçiosas, escultidos o labrados, mas el alma ornada de virtudes. la qual meresçe ser çielo llamada. Ansi por el contrario el coraçon lleno de pecados con razon es llamado jnfierno. Ca a·la manera del jnfierno el tal coraçon es morada de·los diablos. E tyene en·si a manera de jnfierno. tiniebras de ynorançia, e fuego de mala cobdiçia, e gusano de mordiente conçiençia.§»