«Pedro de Raberas fablando de Lazaro. el pobre que tantas bocas touo clamantes quantas llagas al su cuerpo eran atormentantes. E non es marauilla si Dios es amigo en·la perssecuçion. E que cosa deuo yo de buscar. Non cosa alguna çiertamente sinon a Dios deuo querer. a enxienplo de aquella Maria Magdalena. en persona de·la qual dize el doctor Origenes. al mj señor solo busco. y el solo me puede a·»